Calentador solar agua

Calentador solar agua, hemos hablado previamente de la importancia de los métodos y aparatos de obtención de energía renovable, y decimos que éstos son vitales para nuestra existencia debido a que los combustibles fósiles escasean cada vez más.

El desarrollo de las placas solares, los paneles fotovoltaicos, y demás artefactos le han facilitado la vida a más de un individuo, esto ocurrió más específicamente con la invención de los calentadores solares; a través de ellos podemos obtener agua calienta sin gastar electricidad ni gas, ahorrando en consumo energético y sin contaminar al medio ambiente.

Para aquellos que todavía no comprenden la importancia de estos sistemas les decimos que la energía renovable es aquella que puede rehacerse con el tiempo de forma continua y es tan abundante en la tierra que perdura por miles de años, no importa si la usemos o no.

Una de las formas más sencillas de aprovechar la energía que el Sol irradia es usando los calentadores solares de agua los cuales no son solo fáciles de utilizar sino que también muy eficientes.

Los calentadores solares son capaces de canalizar la energía irradiada del Sol hacia nuestros hogares, esto se debe a que cuentan con sistemas fototérmicos; dicha energía se emplea luego para calentar el agua de uso doméstico o para mover turbinas que generen electricidad.

Aunque este proyecto no haya llegado a Latinoamérica creemos que no tardará en hacerlo, los calentadores solares son muy comunes en naciones como Estados Unidos, Portugal, Japón, España, Grecia, Alemania e Israel.

Su auge se debe principalmente a que permiten una considerable disminución en el consumo de gas y ayudan a detener el deterioro de la calidad del aire disminuyendo las emisiones de gases de efecto invernadero, responsables de los constantes cambios climáticos.

Dijimos que un calentador solar de agua basa su funcionamiento en un sistema fototérmico capaz de usar la energía térmica proveniente del Sol para calentar el agua sin empelar combustible alguno; éste está compuesto por: un termotanque en donde almacenamos el agua caliente y una red de tuberías por donde circulará el agua. Generalmente este es el modelo más conocido, es decir, el tradicional, pero en ciudades que padecen bajas temperaturas, están provistos de anticongelantes que evitan que el agua se congele dentro del colector solar.

Seguramente muchos se deben preguntar qué es un colector solar, éstos son los que generan distintos tipos de temperaturas, se dividen en tres modelos: los de baja temperatura, los de media temperatura y los de alta temperatura. Los primeros producen una temperatura inferior a los 65ºC, se emplean para climatizar piscinas, para uso doméstico y actividades industriales como la pasteurización y el lavado.

Los segundos son aquellos que generan temperaturas de entre 100ºC y 300ºC, mientras que los de alta temperatura producen grados mayores a 500ºC y por eso son muy utilizados con el fin de generar electricidad y transmitirla luego a la red eléctrica. El colector solar plano es el típico colector de los calentadores solares, es el artefacto más representativo de la tecnología solar; su principal aplicación es calentar el agua aunque, en algunos casos, se empela para secar productos agropecuarios calentando el aire.

Habitualmente los colectores solares planos están formados por: caja del colector, cabezales de alimentación y descarga de agua, marco de aluminio, placa térmica colectora, aislante térmico (lana mineral, poliéster, fibra de vidrio) y una cubierta transparente.

Los colectores se conectan a los termotanques de almacenamiento que puede tener una capacidad de 115 0 200 litros, se les agrega también dispositivos termostáticos de control para evitar que se congele el agua o que ésta pierda calor por las noches. Con respecto al funcionamiento de los calentadores solares decimos que es más que sencillo: la luz solar se convierte en calor al tocar la placa térmica colectora; se recomienda que ésta sea oscura para poder recolectar el calor de mejor manera.

Debajo de ésta encontramos los cabezales de alimentación y circulación del agua, allí el líquido entrará frío, será sometido al proceso correspondiente, y saldrá caliente. El agua circulará dentro del sistema mediante un mecanismo de termosifón; el agua caliente es más ligera que la fría y, por ende, tiende a subir y por eso se establece una circulación natural sin necesitar de ningún tipo de bombeo.

Para mantener el agua caliente, se almacena en el termotanque, el cual se encuentra forrado por un aislante térmico para evitar pérdidas.